Espacio de opinión de Canarias Ahora
TOMA DE TIERRA
Qué pequeña es la luz de los faros

Quino llamó Libertad a la amiga más pequeña que le dibujó a Mafalda, casi como si le diera pudor pasarla a un plano material, y que alguien de sus propias viñetas le pudiera hacer daño. También Joaquín Sabina se refirió en una canción a lo pequeña que es la luz de los faros de quien sueña con la libertad. Quizá por esto, porque el término es frágil, esquivo, pero poderoso, cuando la Flotilla liderada por el buque Madleen partió de Italia el pasado 1 de junio eligió como nombre y horizonte La Libertad.
El objetivo principal de la Flotilla era llevar a Gaza alimentos para la población civil que está siendo masacrada por el estado de Israel, pero también llevaba un mensaje para la humanidad entera: ante la inactividad de los actores y líderes mundiales que deberían estar día y noche buscando una solución para que no mueran una media de cien palestinos al día, la sociedad civil se organiza e iza las velas para que el resto de seres humanos no muera de vergüenza, desidia o decepción. Ellos portan la bandera de todas esas personas que, impotentes cuando entran o salen de sus trabajos ven en las noticias de sus teléfonos móviles a niños llorando de hambre, quemados vivos, desmembrados o tiroteados cuando van a los puntos de entrega de alimentos.
La Flotilla de La Libertad, entre quienes se encuentran conocidos defensores de los derechos humanos como la joven activista de 23 años Greta Thunberg o la eurodiputada francopalestina Rima Hassan, ha sido asaltada por Israel y secuestrada en aguas internacionales esta madrugada.
El Ministerio de Asuntos Exteriores israelí se apresuró a difundir vídeos donde se veía a soldados ofreciendo a los activistas secuestrados bocadillos y botellas de agua y haciendo virales a través de sus cuentas afines imágenes de la activista más joven de la expedición sonriendo o recibiendo lo que le ofrecían. Así de pronto comenzó la campaña israelí de ridiculización y criminalización de la protesta de la sociedad civil organizada. Tan temprano comenzó el cinismo diplomático de acusar a una flotilla que porta ayuda humanitaria de cometer un delito, pero al mismo tiempo de “ser un yate de celebridades” o “un yate selfie”.
Afirman en un comunicado difundido a través de su cuenta oficial en X que “la zona marítima frente a la costa de Gaza está cerrada a buques no autorizados en virtud de un bloqueo naval legal, conforme al derecho internacional”. Es la primera frase llamativa de este comunicado, ya que Israel no tiene jurisdicción en aguas internacionales porque su ocupación de Gaza es ilegal.
También desde el comunicado de Exteriores, Israel pone en duda la legitimidad de la ayuda humanitaria de La Libertad, que tilda de “truco publicitario”, y afirma que existen “canales y rutas, y [esa ayuda] se transfiere mediante los mecanismos de distribución establecidos. En las últimas dos semanas, más de 1200 camiones de ayuda han entrado en Gaza desde Israel. La Fundación Humanitaria de Gaza ha distribuido cerca de 11 millones de comidas directamente a la población civil de Gaza”. Muy temprano también para la crueldad. Esa fundación a la que hace mención el Ministerio, era la encargada de repartir alimentos el día que abrieron fuego contra los cientos de palestinos que, desesperados por el hambre, acudieron en masa a los puntos de entrega.
Continúa el comunicado íntegro sin manipulaciones por parte de esta redacción: “La zona marítima de Gaza sigue siendo una zona de conflicto activo, y Hamás ha explotado anteriormente las rutas marítimas para realizar ataques terroristas, incluida la masacre del 7 de octubre. Los intentos no autorizados de violar el bloqueo son peligrosos, ilegales y socavan los esfuerzos humanitarios en curso. Llamamos a todos los actores a actuar con responsabilidad y canalizar la ayuda humanitaria a través de mecanismos legítimos y coordinados, y no a través de provocaciones”. Madrugó hoy el cinismo genocida. Israel vuelve a circunscribir en el relato de hechos el inicio del apartheid al que somete a la población palestina al 7 de octubre de 2023, cuando, tal y como ha definido la periodista Olga Rodríguez, “no empezó nada”, ya que Gaza lleva muchos años bajo ocupación ilegal, y décadas violando el derecho internacional y las resoluciones de Naciones Unidas, cometiendo crímenes masivos.
De modo que esta continúa siendo la historia de un genocidio televisado y compartido en redes sociales en tiempo real en el que a una serie de personas que han intentado llamar la atención sobre este hecho se las ha retenido sin que las potencias europeas se den por aludidas.
Ahora las preguntas que deberíamos hacernos, además de tener todas las miradas puestas en la Flotilla de la Libertad, en la marcha que partirá hacia Rafah el próximo 12 de junio o en el convoy con más de 7.000 personas que ha partido hacia Gaza para romper el asedio, son: ¿Qué harán las potencias europeas para defender los derechos de los tripulantes de sus respectivos países? ¿Qué hará Reino Unido, cuya bandera ondea en la embarcación secuestrada? ¿Qué hará Francia para representar y proteger a Rima Hassan, representante del pueblo francés en Europa? ¿Qué hará España, además de seguir vendiendo armamento a Israel, para salvaguardar la vida del español que viaja en la Flotilla, Sergio Toribio? ¿Qué hará el mundo para detener esta barbarie?
Y me refiero, en todo momento, a qué harán, además de tuitear que se les presupone.
Sobre este blog
Espacio de opinión de Canarias Ahora
1