El juez avala la investigación de elDiario.es sobre los mensajes “de carácter íntimo” del exvicerrector de la UB a una alumna

Un juez ha avalado íntegramente la investigación publicada por elDiario.es que desveló que el catedrático y ex vicerrector de la Universitat de Barcelona (UB) Jordi Matas mandó mensajes “de carácter íntimo” a una alumna, a la que le explicó que había tenido un sueño erótico con ella e incluso llegó a seguir por la facultad cuando la estudiante decidió cortar la comunicación con el docente.
La sentencia, que es recurrible, considera que el reportaje tenía “intención informativa”, estaba “apoyado en datos objetivos sustancialmente veraces” y que el autor de la investigación “transmitió información contrastada” sustentada en “hechos documentados” y entrevistas “a varios testigos”. El fallo impone al catedrático el pago de las costas del proceso.
En el momento de la publicación del reportaje, en diciembre de 2023, Matas era vicerrector de la UB, cargo al que renunció para “defender su honorabilidad” y presentar acciones legales contra la exestudiante que relató los hechos a elDiario.es, contra la directora adjunta del periódico, Neus Tomàs, y contra Pol Pareja, el redactor que elaboró la investigación. Matas reclamó una indemnización de 80.000 euros a elDiario.es y de 20.000 a la alumna.
El juez considera que los mensajes que el docente mandó a su alumna, que tenía 21 años en el momento de los hechos y a la que le iba a tutorizar el Trabajo de Final de Grado, fueron de “carácter íntimo, afectivo y seductor” y tenían una “connotación claramente afectiva o implícitamente sexual inapropiada en una relación profesor-alumna”. Añade el magistrado que los WhatsApps que le mandó Matas y que publicó este medio “pueden interpretarse como coercitivos”.
“Es relevante que la demandada, con el transcurso del tiempo, se sintiera incómoda y vulnerada”, prosigue la sentencia, que rechaza que la relación entre Matas y la estudiante pudiera calificarse de “amistad”, tal y como sostenía el catedrático en su demanda.
“Existía una tutela o calificación por parte del actor [Jordi Matas] y por tanto la relación no es neutral sino asimétrica, ya que en ese marco hay una posibilidad real de influencia, de presión por parte del profesor”, añade el juez.
“La situación de desequilibrio genera que la alumna no esté siempre en condiciones de emitir un consentimiento libre, precisamente por la autoridad académica del profesor, que es quien tiene la obligación de garantizar a la alumna una relación estrictamente profesional y un ambiente seguro”, remacha.
El fallo también considera “contrastado” que Matas siguió a la alumna por la facultad, llegándola a esperar en la puerta del bar, cuando esta decidió cortar la comunicación con el catedrático y apartarse de él después de que Matas le confesara, en su despacho, el episodio del sueño erótico.
El juez también exime a la exalumna de cualquier responsabilidad por haber relatado a petición de elDiario.es su versión de lo ocurrido y lo enmarca en su derecho a la libertad de expresión.
La joven llegó a denunciar a Matas por acoso sexual ante la Unidad de Igualdad de la UB en 2017, pero una comisión formada por tres hombres desestimó el caso y lo cerró con una reprimenda verbal al docente. “La resolución adoptada por la UB de que no existió indicio de acoso por parte del Sr. Matas no evita que con posterioridad la prensa pueda investigar los mismos [hechos]”, añade el fallo.
Sobre la relevancia informativa de lo desvelado, a pesar de haber ocurrido hace más de un lustro, el veredicto señala que los hechos seguían teniendo “trascendencia pública” y “habían pasado desapercibidos, pese a la relevancia que tenían”.
Como ejemplo, señala las protestas que se convocaron y la repercusión que tuvo el reportaje en otros medios. También el hecho de que la propia UB, apenas dos meses después de su publicación, modificara su código ético para considerar “mala praxis” las relaciones sexoafectivas entre docentes y alumnos.
El fallo recuerda, a su vez, que el propio rector de la UB, Joan Guàrdia, citó en su despacho a la estudiante en abril de 2021, dos días antes de nombrar a Matas como vicerrector, para hablar del asunto, tal y como desveló esta redacción. “Se trata de hechos que años después de que tuvieran lugar tenían relevancia para los propios gestores de la universidad”, concluye el magistrado.
Bulos contra la estudiante que denunció a Matas ante la UB
Mientras ha durado el proceso judicial contra elDiario.es y la joven que relató su caso en el reportaje, la exestudiante ha sido objeto de ataques con falsedades en más de una ocasión por parte de distinto personal de la universidad.
Al menos dos empleados de la UB han difundido en reuniones públicas de la UB el bulo de que la exalumna se había retractado en sede judicial de sus acusaciones contra Matas, un hecho totalmente falso y que, según fuentes consultadas, también difundían en privado algunos profesores del departamento de Políticas de la UB.
“Nos preocupa la sensación de abandono del Dr. Matas en un momento en que está a punto de resolverse la demanda que él presentó”, aseguró en el Consejo de Gobierno del Rectorado del pasado 9 de octubre Jordi Guilleumes, técnico de información de la universidad. “Precisamente ahora que la presunta víctima ha afirmado ante el juez que no hubo ningún acoso”.
Pocos meses después, en el claustro del 18 de diciembre, fue una profesora de la Facultad de Farmacia, Mireia Oliva, la que difundió el mismo bulo, insistiendo en la mentira de que la exalumna se había retractado en sede judicial de sus acusaciones.
“El año pasado una publicación en un medio digital puso en cuestión la honorabilidad del Dr. Matas y de paso la actuación de la universidad que archivó por falta de fundamentos una queja presentada en 2017”, afirmó Oliva, leyendo un comunicado en nombre del sindicato Intersindical. “Curiosamente la presunta víctima, en un escrito presentado ante el juez, acabó desmintiendo las acusaciones”, añadió, insistiendo en la falsedad.
Cuando, en el claustro del 18 de junio de 2024, un profesor reprochó al rector de la UB, Joan Guàrdia, que no se hubiera tomado ninguna decisión más dura contra el catedrático, después de que más de 100 profesores firmaran una carta pidiendo su cese, y criticó los hechos que se le atribuían a Matas, Guàrdia se manifestó de la siguiente manera:
“El Dr. Matas ha iniciado sus acciones legales a las cuales todo ciudadano tiene derecho y por lo tanto estaremos atentos a la finalización de este proceso judicial”, afirmó el rector. “De mientras, debemos defender la integridad de las personas y, sobre todo, no hacer afirmaciones de las cuales alguien, en algún momento, se va a tener que arrepentir”.
Este periódico se ha puesto en contacto con la UB, que ha rechazado pronunciarse sobre la sentencia alegando que la universidad no ha formado parte de este proceso judicial.
“El Dr. Matas está ejerciendo su actividad académica en la UB porque no ha sido nunca sancionado”, señala una fuente oficial. “La investigación interna de 2017 concluyó con el archivo y nadie lo recurrió ni se produjo ninguna demanda por la vía judicial”.
Actualmente Matas ejerce de coordinador del “Segundo plan de Dinamización lingüística de la universidad” y, según la UB, la reciente sentencia que avala el reportaje de elDiario.es “no afecta en ningún sentido esta situación”.
8